Este verano, manosea Tampax.

Retomo mi labor con lo nuevo de Tampax y Amaia Salamanca.

Nunca un spot de tampones había sido tan surrealista.

Comienza con la piscina de una lujosa mansión y con la guapísima Amaia luciendo palmito.

Pero claro, todo se complica cuando uno de los asistentes hurga en el bolso de ella, interesado en coger el tampón (WTF?) y en su funcionamiento. (No intentéis buscar la lógica, porque no la tiene)  

¿Y ESTA NUEVA FORMA DE LIGAR? ¿qué ha quedado de ese pudor que solemos tener las chicas al sacar del bolso este tipo de productos de higiene íntima?

Y cuando menos te lo esperas está la rubia introduciendo el tampón en la mano de él, explicando las ventajas del producto con un par de maravillosas frases ambiguas:

“- nunca un tampón había sido tan fácil de introducir. ¿ves? hasta aquí.  Y nunca antes había sido tan fácil de colocar en el lugar correcto.”

Después un truquito de magia, desaparece el objeto en cuestión y ¡zas! ya tenemos concepto, y que aquí nadie note nada.

Por último, no podemos olvidar a esos hombres que cotillean a lo lejos y ‘disimuladamente’ se interesan por el tema, nada más lejos de la realidad.

Y aquí la prueba del delito: